Per la pasta choux:
83 ml di acqua
33 gr di burro
50 gr di farina
80 gr di uova
¼ cucchiaino di zucchero
sale
Per la crema pasticcera:
2 tuorli
100 gr di zucchero
25 gr di farina
4 lt di latte
12 gr di burro
1 cucchiaino di vanillina
50 gr di cioccolato fondente
Per i bignè:
Porre l'acqua sul fuoco con il burro, lo zucchero e un pizzico di sale. Quando l'acqua bolle, togliere il tegame dal fuoco e versarvi dentro, tutto di un colpo, la farina setacciata; mescolare bene fino a formare una palla di pasta liscia. Rimettere il tegame sul fuoco e, sempre mescolando con un cucchiaio di legno, asciugare la pasta fino a che formerà un velo sulle pareti del tegame.
Togliere dal fuoco, lasciate intiepidire l'impasto ed aggiungere, la prima metà delle uova tutta in una volta. La seconda metà a filo facendo attenzione alla consistenza che si vuole raggiungere, può essere che l'impasto assorba meno liquidi. Il composto deve risultare morbido e brillante e deve staccarsi dal cucchiaio cadendo pesantemente.
Disporre la pasta (meglio con la sacca da pasticceria munita di bocca liscia) a mucchietti sulla placca leggermente imburrata del forno, tenendo i pezzi separati poiché in cottura si gonfiano diventando circa il doppio del volume iniziale. Passare in forno caldo a 200° C per i primi 15 minuti, abbassare poi a 180°C per ulteriori 15 minuti. A questo punto spegnete il forno e lasciate all'interno i bignè per altri 15 minuti con lo sportello leggermente aperto (mettete tra lo sportello e il forno un cucchiaio di legno), questo servirà a fare asciugare bene l'interno, quindi estraeteli dal forno.
Per la crema:
Mescolare i tuorli con lo zucchero e la farina. Versare piano piano il latte freddo e mescolare bene. Mettere sul fuoco e mescolare ogni tanto fino il bollore. Cuocere per altri 5 minuti senza smettere di mescolare. Togliere dal fuoco e aggiungere il burro e la vanillina. Lasciar raffreddare coprendo con la pellicola a contatto con la crema per evitare che si formi la crosticina dura.
Con un coltello fare un buco sotto ogni bignè e riempire con crema pasticcera.
Sciogliere del cioccolato fondente e versare con un cucchiaio sopra ogni bignè.
Para la pasta choux:
83 ml de agua
33 gr de manteca
50 gr de harina
80 gr de huevo batido
¼ cucharita de azúcar
1 pizca de sal
Crema pastelera:
2 yemas
100 gr de azúcar
25 gr de harina
¼ lt de leche
12 gr de manteca
1 cucharadita de esencia de vainilla
50 gr de chocolate para derretir
Para los bigné:
Mezclar las yemas con el azúcar y la harina. Echar de a poco la leche fría. Colocar sobre el fuego y revolver. Una vez que hierve, cocinar otros 5 minutos sin dejar de revolver. Quitar del fuego y agregar la manteca y perfumar con la esencia de vainilla.
Dejar enfriar cubriendo con papel film directamente sobre la superficie de la crema para que no se forme la película dura.
En una cacerola pequeña, colocar el agua, la manteca cortada en pequeños trozos, una pizca de sal y la cucharadita de azúcar. Llevar a ebullición sin parar de remover. Añadir la harina de golpe y mezclar bien para que se incorpore. Bajar el fuego y seguir removiendo constantemente para secar la masa , hasta que se separe de los bordes de la cacerola y se forme una bola.
A continuación retirar del fuego y pasar la masa a un bol; añadir la mitad del huevo batido y mezclar vigorosamente para incorporar. Hacemos lo mismo con los otros 40 g. Es extremadamente importante batir los huevos antes de añadirlos. Tiene que quedar una consistencia homogénea y brillante.
Colocar la masa en una manga con boquilla lisa y formar copitos sobre una placa enmanteca (separados entre sí porque creceràn durante la cocción).
Llevar a horno precalentado a 200 °C por los primeros 15 minutos y bajar a 180°C por otros 15 minutos. Apagar el horno y dejar la placa con los bigné adentro y abrir un poco la puerta del horno (se puede colocar una cucharada de madera). Esto sirve para secar bien la masa. A los 15 minutos verificar si están a punto, y si no, dejarlos adentro hasta que se enfrie el horno.
Para la crema:
Mezclar las yemas con el azúcar y la harina. Echar de a poco la leche fría. Colocar sobre el fuego y revolver. Una vez que hierve, cocinar otros 5 minutos sin dejar de revolver. Quitar del fuego y agregar la manteca y perfumar con la esencia de vainilla.
Dejar enfriar cubriendo con papel film directamente sobre la superficie de la crema para que no se forme la película dura.
Con un cucchillo hacer un agujero debajo de cada uno y llenarlos con la crema pastelera (con una manga).
Derretir el chocolate a baño maria y volcar con una cucharita sobre cada uno.